Los que por alguna razón leen

sábado, 22 de septiembre de 2012

Sin armadura

      
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Hoy dejo caer mi espada,
me deshago de mi armadura
para rendirme a tu mirada
llena de ternura.

Hoy desecho mis principios
y dejo que mis latidos sofoquen
mi aliento,
que se me hinche el pecho
y explote por dentro
para caer en el foso
de los amoríos ficticios.

Quiero nadar en ellos
y soñar que aún no perezco,
que no me desvanezco
en el camino de un amor extinto,
quiero soñar que puedo desplegar
las alas y volar.
Hoy me saco las armaduras
para decir que me haces soñar

Stgo. 14/05/2012